EL BARÇA ES EL NUEVO FAVORITO DE LA LIGA

ATLETICO DE MADRID11REAL MADRID

Simeone le dio vida a Zidane, con su pecado habitual: el miedo. Fue el regalo de un punto, que quizá ni le sirva para nada al Madrid. El técnico del Metropolitano volvió a las andadas, con su esperpéntico complejo de madriditis.

Cuando pudo haber acabado con toda posibilidad del Madrid en la Liga, una vez más metió a su equipo en un gruta oscura, sin luz para salir de ella y a expensas de que Oblak pudiera hacer algún milagro más. Es el perpetuo corazón oscuro de Simeone.

Todo ello, en un mediocre, nervioso y repleto partido de errores. Con dos equipos que en el minuto setenta parecían como dos boxeadores sonados. Faltos de oxígeno, en las piernas y en los pulmones. Por eso, los minutos finales fueron como una procesión de disparates tanto individuales como tácticos. Una auténtica ruleta rusa, pero con el Madrid en posesión de la pistola.

Es cierto que es el Atlético desaprovecho en el primer cuarto del segundo periodo hasta tres ocasiones de haber podido acabar con el partido. Pero Carrasco nunca será un finalizador y Luis Suárez estaba muy forzado. Además, siempre aparece el larguirucho, “papá piernas largas” de Courtois, como el santo divino.

También el Madrid debió empatar poco después, con hasta tres ocasiones de libro de Benzema, pero a este “chat noir” francés, ya se sabe que necesita hasta cuatro ocasiones o quizá más para poder hacer un gol. ¿Se imaginan si el Madrid tuviera un goleador?. Por eso pienso, que Benzema, por muy excelente que juegue, le ha hecho más mal al Madrid que bien. Porque sin gol, no hay paraíso.

Claro que según su “creador” Zidane, el tampoco hacía un gol y “era muy bueno”. ¡Que manera de justificar que su equipo no mete un gol ni al arco iris!. El técnico galo volvió a dar una exhibición de como no tener una idea de estructura de partido. Cuanto menos una estrategia. Una vez más puso a Mendy, casi de extremo izquierdo, sin ayuda, porque Asesio y Rodrygo jamás colaboraban. Por tanto se hinchó ese huracán por el lado derecho, llamado Marcos Llorente, que decía Zidane, que no tenía categoría para jugar en el Madrid. ¿Dónde estaba Mendy en la carrera de Llorente y su pase de gol a Súarez?. Pues no estaba ni en el centro del campo. Estaba aún más lejos.

Eso es regarle un gol a un equipo que está tan canino de goles como tú. Mendy lleva regalando dos goles al enemigo por su posición. El otro día cuando llegó tarde al cabezazo de Portu. Courtois hace milagros, pero no siempre.

Claro que Simeone es un horror con la elección de jugadores. Jugar con Lemar y Correa es jugar con dos menos. Nadie intuye los intríngulis para apoyar a esos dos jugadores. Y para colmo, su desprecio a Joao Félix le hace pecar calamitosamente , en ponerlo no cuando el equipo juega lejos del área, sin la posible ventaja del luso cerca del área.

Así que en medio de elecciones, sin duda, el Barcelona se presenta como el nuevo favorito a la Liga. No me cabe la menor duda. Su juego es implacable con Messi, Dembelé, De Jong, el increíble Jordi Alba, ahora en modelo goleador y, hasta esa nueva perla negra, llamada Illaix Moriba. Y falta Ansu Fati, que está al caer. Koeman se puede convertir en el juez que salve al ahorcado Barça.

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