Los antiguos incluso crearon dioses para fomentar la mierda sobre pueblos o instituciones. La más famosa era Cloacina, diosa de las heces y las letrinas. Es la diosa actual de las críticas sobre el Real Madrid. La Casa Blanca es la mansión de las ofrendas a la mierda. La televisión huele día a día más mierda Real. Los críticos han besado el culo del diablo, que es su forma de adoración.
La crisis del Madrid es la burla del diablo. Me entra la risa como algunos presumen de duros, analíticos y brillantes, porque se atreven a meterse en la actualidad con Rafael Benítez, con Florentino Pérez. Está de moda y así creen que se hacen más importantes, porque en realidad no tienen ninguna relación personal con los 'famosos actuales' del fútbol. Aunque me parece grotesco que alguien presuma de ser 'amigo' de Ramos o de Isco. No entiendo nada. Presumir de decirle a la novia que "soy amigo de Ramos". Por regla general todos esos 'amigos' cobran sueldos humildes, mientras que los Ramos y compañía sólo los utilizan para cobrar diez millones al año.
AFP
Pero vamos a la feria de las vanidades. No me puedo imaginar lo que soltarían por esa boquitas los escatológicos del Real Madrid si su equipo no hubiera ganado los tres últimos partidos. Que el último, frente al 'peligroso' Deportivo, en tu propio campo y tras ir ganando por dos a cero, se regalaran los puntos. ¿Se imaginan? Luis Enrique cambió a tres jugadores para perder dos puntos. Si hubiera ocurrido con Rafa Benítez estaría limpiando letrinas en Mersey. Pero en Barcelona nadie se atreve a ni una puñetera crítica. Se atraganta el 'lobo' ¿Crisis? ¿Qué es eso? Da igual, aunque a los socios los saqueen hasta para pagar la manicura de Neymar, que pudiera llevar a la cárcel a media directiva del Barcelona. Pero con la dictadura nacionalista, cualquier crítico barcelonista no sale en la foto. Por supuesto, en Madrid, aunque no tuvimos letrinas hasta finales del siglo XVIII, se ejercita la libertad.
Es sarcástico invocar a la cólera del cielo contra Rafael Benítez. El problema no es ese. Lo he escrito por activa y por pasiva. Claramente, indiscutiblemente los problemas son Sergio Ramos y Cristiano Ronaldo, que son los presidentes actuales entre los jugadores. Si ellos no quieren , ya puede venir Guardiola, el demonio Mourinho, Klopp y la Santísima Trinidad, como tripartito técnico. Son ellos dos los que mandan. Y le avisaron a Pérez. El mensaje era que si no se quedaba Ancelotti, con el que hacían lo que les venía en gana, el Madrid sería peor.
Desde ese momento, Rafael Benítez ya estaba condenado, incluso antes de venir. Escribí que "era un error, un gran error" que viniera ante las fieras de la letrinas de Chamartín. Ya no tiene solución. Quitarlo es volver dar el poder a Ramos y Ronaldo.
Pero si Florentino Pérez quiere seguir en el cargo sólo le queda una salida. Benítez, Benítez y Benítez y darle toda la autoridad. Y darle todos los derechos si quiere quitar a Ramos, Kroos, los nausebundos Isco y James, con físicos antifutbolistas y, sobre todo, a Cristiano, que sólo juega para su empresa: CR7. Inaceptable el chantaje que el 'narciso' de Madeira está ejerciendo sobre el Madrid y Benítez, con el apoyo de un impresentable Ramos, que utilizó la salida de Casillas para hacerse más millonario. El Madrid ha construido a un ídolo que marca el 'hedor' y que él mismo se ha colocado una tina en la que todo el madridista tiene que lavarle su piés de oro.
Entre los paganos de las suciedades, ya están preparando a Zidane para elegirlo como nuevo dios del estiércol de Chamartín. Otra carcajada más para Sergio y Cristiano desde la sociedad coprófaga.
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